El nacimiento de Jétsunma Khandro Yeshé Réma fue un suceso notable. Yeshé Réma era una gTértön a quien Yeshé Tsogyel le dió el nombre de Khyungchen Aro Lingma en una visión, cuando Gomchenma Pema ’ö-Zér recibía sus ciclos de enseñanza y prácticas visionarias de Yeshé Tsogyel. Nació con gran facilidad y sin emitir ningún sonido. La primera cosa que hizo fue producir un muy prolongado silbido con los labios vueltos hacia arriba en aspecto Airado, como si estuviese haciendo un ejercicio respiratorio Tsa-lung. En su nacimiento aparecieron en el cielo un gran número de águilas. Se mantenían planeando y deslizándose muy cerca de la cueva de retiro de sus padres. Toda clase de fenómenos se vieron en el cielo al momento de su nacimiento, incluyendo la formación de nubes con formas de yungdrung y gakyil. Fuertes ráfagas de viento aparecian y desaparecían muy rápidamente. El sol y la luna eran claramente visibles al mismo tiempo en el cielo. Su madre permaneció en un estado de Visión durante el nacimiento, siendo asistida físicamente por Rang-rig Togden.
Aro Lingma de niña dormía muy profundamente pero siempre con sus ojos abiertos ampliamente. Nunca era fácil saber si estaba dormida o despierta porque frecuentemente se dormía sentada sin ningún apoyo. No habló hasta sus cinco años. aunque entonces lo hizo fluídamente y sin esfuerzo. Hasta ese momento, ella simplemente escuchaba a su madre y su padre practicando o dando enseñanzas sobre la práctica. Fue criada enteramente en retiro y nunca vio a otro niño hasta ser una mujer adulta. En su infancia, vagó extensamente por las montañas de los alrededores de la cueva de meditación de sus padres. Solía desaparecer toda vez que alguien venía a visitar y traer alimento y ofrendas a la pareja de sus padres. Expresamente evitaba ver a nadie que no fuesen sus padres, y ellos se sentían felices de poder cumplir con su deseo. Nunca cuestionaron ninguna cosa que quisiese o hiciese. Deseaba muy pocas cosas y usualmente permanecía tranquila, exceptuando fuertes e inesperados accesos de risa. A veces salía durante varios días y volvía contando haber visitado otras dimensiones de existencia y de haberse encontrado con Yeshé Tsogyel y Padmasambhava. Sus padres la instruyeron en Trül-khor (Yantra yoga) desde muy temprana edad y logró maestría en gTu-mo a la edad de nueve. Hasta su adultez al dejar la cueva de retiro, no había podido soportar estar vestida durante la mayor parte del año. Por esto fue llamada Réma, mujer que viste de algodón, porque tenía el poder para la generar su propio calor interno.
Aro Lingma tenía dieciseis o diecisiete años cuando sus padres manifestaron cuerpo arcoiris (’ja-lus). Los cosió juntos dentro de una carpa blanca luego de recibir sus advertencias finales, instrucciones, y predicciones; y se retiró a una distancia de veintiun pasos para comenzar su práctica. Siete días después abrió la carpa y todo lo que allí quedaba eran las respectivas ropas, pelo, uñas de manos y pies y el septum nasal. Habían tomado cuerpo arco iris juntos. Es un acontecimiento sumamente inusual el que dos personas logren cuerpo arco iris al mismo tiempo, aunque era algo que su madre había predicho muchos años antes. Este acontecimiento tuvo un profundo impacto sobre Aro Lingma y le hizo madurar muchas facultades latentes. Reunió las reliquias de sus padres y se dirigió hacia el Norte de Kham y Golok donde su Madre había predicho que encontraría un sang-yab adecuado para la realización de un Ciclo gTérma que sería útil en el futuro para el beneficio de seres de tierras distantes. Su madre le había dado indicaciones de que este ciclo gTérma sería de inmenso beneficio en el futuro, si ciertas condiciones se cumplían, aunque allí también habría muchos obstáculos circunstanciales a superar.
Aro Lingma viajó de lugar en lugar, practicando y viviendo como una yogini errante. En varias ocasiones tuvo la oportunidad de unirse con otros grupos de practicantes pero su intención era de viajar sola. A veces fingía ser muda, a fin de evitar tener que hablar con la gente, especialmente si eran religiosos. Siempre hablaba con los niños y con personas comunes, especialmente si parecían tener dificultades; pero siempre que pudo evitó a los religiosos. Le llevó cerca de un año llegar al Norte de Kham y Golok donde estaba predicho que conocería a su sang-yab. Allí conoció ’a-Shul Pema Legden que era monje y discípulo de Khalden Lingpa. Inmediatamente reconoció a ’a-Shul Pema Legden como poseedor de la potencialidad para realizar la Visión, y entonces viajaron juntos al Sur de Tibet. ’a-Shul Pema Legden dió sus votos de monje y se convirtió en el sang-yab de Aro Lingma. Durante su viaje al Sur del Tibet, Aro Lingma tuvo diversas experiencias de la Visión profunda de Yeshé Tsogyel, en las que realizó los ciclos de Enseñanza y práctica que su madre había profetizado. Estos ciclos de enseñanza y práctica llegaron a ser conocidas como Aro gTér, las enseñanzas del linaje de la Esencia Materna. Estas enseñanzas sobreviven hoy como un cuerpo de enseñanzas y práctica muy esencial y no-complejo.
El Budismo Tibetano se conoce en Occidente principalmente en términos de vida monástica. Al respecto a la sangha monástica, cabe destacar que la enseñanza de las escuelas de budismo tibetano y Bön son accesibles generalmente mediante monjes. Solo una pequeña minoría de Budistas Occidentales siguen a Lamas tibetanos que sean monjas. En la actualidad la única monja tibetana que enseña en Occidente es Khandro Rinpoche, un Lama femenino de la Escuela Kagyüd. El predominio masculino en la cultura espiritual de Tibet parece ser mayoría hasta donde las personas saben. Sin embargo no es enteramente inadecuado considerar que la cultura espiritual dominante de Tibet, no transmite el mismo dinamismo espiritual que el transmitido por la óptica femenina y la de los muy pequeños linajes familiares que han existido, en los cuales fueron mujeres quienes lideraban en lo espiritual.
Contrariamente a la impresión cultural manifiesta, había muchas mujeres en Tibet que eran maestras del nivel más profundo, y muchas de ellas tuvieron numerosos discípulos varones entre los altísimos dignatarios monásticos. Algunas practicaban como monjas ordenadas, pero muchas otras practicaban como Ngakmas y yoginis laicas ordenadas. Los Ngakma y Ngakpa (su equivalente masculino) estaban ordenados en la sangha tántrica Ngakphang y solían vivir como parejas casadas. Tanto las Ngakma como las yoginis laicas habitan en los países del Himalaya que rodean al Tibet; pero no es simple o fácil conocerlas, o incluso verlas. Una muy notable mujer es Jétsunma Khandro Ten’dzin Drölkar, la destacada yogini que me contó la vida de Jomo Menmo. Tengo la inmensa buena fortuna de conocerla tanto de maestra como de hermana vajra,; y como tal, la he presentado a varios de mis estudiantes. Jétsunma Khandro Ten’dzin Drölkar es un yogini oculta. Muy poca gente en Occidente ha oído de ella, e incluso en India y Nepal ella no es demasiado conocida. Es indistiguible de cualquier otra anciana tibetana que pueda pasar por las calles de McLeod Ganj, Dharamsala donde actualmente vive. A pesar de su anonimato, ella es amiga personal del Ven. Sonam Sangpo Rinpoche, del Ven. Tharchin Rinpoche y de Su Santidad Dungse Thinley Norbu Rinpoche, y es altamente respetada por ellos a causa de la profundidad de su práctica y realización. Es una yogini Dzogchen que ha pasado la mayoría de su vida entrando y saliendo de retiros. Ella ha constituido también una familia, y sobrevivió a un esposo algo difícil. Uno de sus hijos, Trülku Ten’dzin, fue reconocido como una encarnación Nyingma, y actualmente vive en retiro semi-abierto con Kyabjé Chatral Rinpoche en Yang-le-shöd en el valle de Kathmandu en Nepal.
Aparte de las muchas mujeres practicantes y maestras individuales en Tibet, también existían pequeños linajes paralelamente a los más importantes linajes Nyingma. Estos eran los linajes menores de los recluídos en las montañas, tanto de varones como de mujeres; y también, ocultos linajes femeninos que han pasado sus enseñanzas a través de sus hijos más que mediante las líneas de encarnación. El Linaje de Esencia Materna es uno de estos linajes de enseñanza y práctica. El Linaje de Esencia Materna es primariamente un linaje de mujeres muy extraordinarias, de sabiduría no convencional, que han vivido en retiro solitario o casadas. Fueron errantes yoginis Nyingma, y con sus parejas vivieron en comunidades como el Aro Gar, donde el Linaje de Esencia Materna fue difundido. El Linaje de Esencia Materna pasó inicialmente desde la tía a la sobrina, y luego desde la madre a la hija. Con esta hija, comenzó la línea directa de hijas, línea que se destinó a continuarse mediante una sucesión de mujeres, pero debido al cúmulo de circunstancias y la intervención de la invasión China, la línea de sangre se interrumpió. La hija era una Visionaria extraordinaria con el nombre de Aro Lingma, quien transmitió sus enseñanzas a un pequeño grupo de hombres y mujeres que se reunieron a su alrededor en la fase final de su vida. De entre este pequeño grupo de no más de cien discípulos, hubo un predominante número de yoginis realizadas, nueve de las cuales tuvieron notables capacidades yógicas. A-yé Khandro y A-shé Khandro en particular, manifestaron poderes yógicos tales como telepatía, clarividencia y capacidad de conversar con animales y seres de otras dimensiones.
Aro Lingma era un gTértön de visión pura, es decir un descubridor de tesoros espirituales. Recibió varios ciclos de prácticas directamente de Yeshé Tsogyel, el Buddha femenino y consorte de Padmasambhava. Estas prácticas eran únicas y extraordinarias, ya que se practica con las formas de un Ser Consciente (deidad de meditación) que eran todas las manifestaciones de Padmasambhava y Yeshé Tsogyel. Junto con estas prácticas estaban los métodos de la tres series del Dzogchen y sus prácticas psico-físicas subordinadas. Aro Lingma recibió indicaciones de su madre respecto de realizar estas prácticar en secreto, y solamente enseñarlas a su hija. Esto signifixó que sería su hija quien transmitiría estas enseñanzas al mundo.
Desafortunadamente, debido a circunstancias inauspicious, Aro Lingma dió nacimiento a un hijo, y la línea de sangre se rompió. Su sang-yab (esposo espiritual) murió, y ella nunca tomó otro consorte. Su madre le había aconsejado que debería tener un único sang-yab. También le indicó que debería tener únicamente un niño; de otra manera su vida se acortaría apreciablemente, y así tendría poco tiempo para asegurar el entrenamiento espiritual de su hija. El sang-yab, ’a-Shul Pema Legden, era un anciano lama. Murió mientras Aro Lingma era todavía bastante joven, y antes que hubiese nacido su hija. Esto podría haber significado que los ciclos de enseñanza Visionaria de Aro Lingma casi desapareciesen del mundo, pero mediante su poder yógico fue capaz de concebir poco tiempo antes de la muerte de ’a-Shul Pema Legden. Ella lo guió a través de las visiones del Bardo, el estado intermedio entre las vidas, logrando que él naciese como su propio hijo. No era posible que ’a-Shul Pema Legden renaciese como mujer debido a sus propios obscurecimientos kármicos remanentes, y entonces se perdió la oportunidad en términos de hacer que estas enseñanzas fuesen ampliamente conocidas. La madre de Aro Lingma había aconsejado sobre el poco auspicioso evento de dar a luz un hijo, y como resultado de mantener estas instrucciones muy cuidadosamente, le resultó posible pasar la enseñanza a su hijo mediante aparecerse ante él en forma de visión después de su propia muerte, mientras estaba en retiro solitario a los ocho años de edad.
El hijo de Aro Lingma fue llamado Aro Yeshé, y dejó instrucciones de que las prácticas visionarias que él daría se llamarían Aro gTér. Aro Yeshé fue el nombre que ella habría dado a su hija, si hubiese sido capaz de dar nacimiento a una niña. Durante su niñez, Aro Yeshé se mantuvo alejado de otros jóvenes y de los hombres en general. Fue auxiliado luego de la muerte de su madre, por cinco yoginis que ella había elegido para asistirlo en su educación. Sus amigos de la niñez fueron dos hermanas llamadas A-yé Khandro y A-shé Khandro quienes luego llegarían a ser sus sang-yum. Estas dos niñas fueron sus dos primeras discípulos a quienes transmitió el Aro gTér, y ellas fueron quienes realmente pasaron las enseñanzas a los otros discípulos de Aro Lingma. El propio Aro Yeshé muy rara vez enseñó porque la transmisión se veia tanto más poderosa si se recibía de mujeres.
Desde la muerte de Aro Lingma, la tradición fue continuada por un sostenedor de linaje masculino, apoyado por su asociación con dos poderosas mujeres. Esto llegó a ser llamado la línea indirecta del hijo. Se llamó indirecta porque vino mediante un sostenedor de linaje masculino, y en esta tradición, los practicantes varones tienen bendiciones del linaje menos poderosas. Hay sin embargo una predicción, que la línea directa de hija resurgirá con mayor poder si suficientes mujeres alcanzan realización con los métodos visionarios del Linaje de Esencia Materna.